Como suele ser costumbre por estos aciagos amaneceres, se fueron, no en muy buenas condiciones, estos dos señores de la oscuridad más ombría a tomar unos exquisitos canapés al delicioso y glamouroso establecimiento Los NIños del Flor, donde gozaron de la gratísima compañía de otras profesionales de la noche. Estos desayunos son mejores que los de la Cope. Y mañana, mucho más!!!
Como suele ser costumbre por estos aciagos amaneceres, se fueron, no en muy buenas condiciones, estos dos señores de la oscuridad más ombría a tomar unos exquisitos canapés al delicioso y glamouroso establecimiento Los NIños del Flor, donde gozaron de la gratísima compañía de otras profesionales de la noche. Estos desayunos son mejores que los de la Cope. Y mañana, mucho más!!!
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