Acabo de terminar el aclamado juego del genial Fumito Ueda, la Sombra del Coloso. Han sido alrededor de 14 horas de inmersión profunda en una experiencia única y original.
Los creadores del fantástico ICO -deo gratia, no admirado sólo por unos pocos-, nos adentran en una aventura que se aleja de las propuestas tradicionales; una aventura de dimensiones y ambientación totalmente épicas que nos sumerge en un mundo inhóspito y desierto, para buscar y destruir a dieciseis impresionantes colosos.
El mundo creado, con infinidad de paisajes y atmósferas diferenciadas, sin tiempo de carga alguno, nos demuestra las cotas de realismo que la ps2 puede alcanzar y otorga al jugador unas sensaciones únicas.
Esta aventura hay que jugarla: buscar a los colosos es ya una en sí misma; pero destruirlos es descomunal. Un desarrollo de juego que parece ser simple pero que no lo es en absoluto.
Si queréis alejaros de los juegos mata-mata-infiltración-mata-busca tradicionales y deseáis probar nuevos retos, no lo dudéis: Shadow of the Colossus no os va a defraudar.
ps. Para los que terminaron ICO. La historia continúa...
Los creadores del fantástico ICO -deo gratia, no admirado sólo por unos pocos-, nos adentran en una aventura que se aleja de las propuestas tradicionales; una aventura de dimensiones y ambientación totalmente épicas que nos sumerge en un mundo inhóspito y desierto, para buscar y destruir a dieciseis impresionantes colosos.
El mundo creado, con infinidad de paisajes y atmósferas diferenciadas, sin tiempo de carga alguno, nos demuestra las cotas de realismo que la ps2 puede alcanzar y otorga al jugador unas sensaciones únicas.
Esta aventura hay que jugarla: buscar a los colosos es ya una en sí misma; pero destruirlos es descomunal. Un desarrollo de juego que parece ser simple pero que no lo es en absoluto.
Si queréis alejaros de los juegos mata-mata-infiltración-mata-busca tradicionales y deseáis probar nuevos retos, no lo dudéis: Shadow of the Colossus no os va a defraudar.
ps. Para los que terminaron ICO. La historia continúa...
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