Todo el orbe sabe que Sevilla, además de producir muchos de los grandes exponentes de las artes mundiales, siempre produjo un poderoso influjo sobre las personalidades más excelsas de nuestro Viejo Continente; pero, incluso a estas alturas de evolución de vida pseudointeligente en el planeta, había gente que no había sucumbido a los encantos de la Ciudad... digo había porque ahora sí que por fin ha caído del caballo al conocer la Verdad.
Sí, queridos amigos, RafaELO por fin vino a Sevilla! Digo por fin, porque el muy PERROFLAUTA vivía en la herejía hasta esta última semana. Escoltado por el tudmiriense Claudius, los dos llegaron a la Metrópolis para recibir el sacro bautismo hispalense y el laureado púrpura de sus arcanos, en la noche sevillana.
No podemos, en este documento, contarlo todo; pero seguro que sus aventuras sevillanas continuarán, fijo!
Esperemos y deseemos que lleven consigo la Luz para iluminar a las provincias orientales.
Comentarios