Queda claro que mucha gente relaciona el nombre de Sta. Justa con Sevilla; pero otra mucha ignora el nombre de su hermana, santa ella también y patrona primigenia de la Ciudad: Sta. Rufina. Esto es, el binomio inseparable, Sta. Justa y Rufina. Siendo ambas las primeras mártires cristianas bajo el yugo romano -martirio que los que estudiamos en los Salesianos de la Trinidad conocemos muy bien, al encontrarse las cárceles romanas, visitables en parte, bajo nuestro Colegio- y por ende patronas primitivas de Hispalis.
Sta. Justa siempre ha estado en Sevilla: sobre todo, por su gran estación. Pero, Sta. Rufina...
Ya está aquí. Representada en la obra de Velázquez que porta su nombre, Sta. Rufina viene a su Ciudad para quedarse.
Pero no la han traído ni la Menestra de Cultura, ni la Junta de Andalucía -que pidió a los sevillanos y andaluces que pujaran para que el cuadro estuviera donde le corresponde- al salir en puja pública por Sotheby's.
No han sido ellos. Ni siquiera el Ayuntamiento de nuestra Ciudad; la ha tenido que comprar para Sevilla, Abengoa pagando 11 millones de euros...
Sta. Justa siempre ha estado en Sevilla: sobre todo, por su gran estación. Pero, Sta. Rufina...
Ya está aquí. Representada en la obra de Velázquez que porta su nombre, Sta. Rufina viene a su Ciudad para quedarse.
Pero no la han traído ni la Menestra de Cultura, ni la Junta de Andalucía -que pidió a los sevillanos y andaluces que pujaran para que el cuadro estuviera donde le corresponde- al salir en puja pública por Sotheby's.
No han sido ellos. Ni siquiera el Ayuntamiento de nuestra Ciudad; la ha tenido que comprar para Sevilla, Abengoa pagando 11 millones de euros...
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